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Quinto Obispo Diocesano

Héctor Cubillos Peña

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Quinto Obispo Diocesano

Héctor Cubillos Peña


( Periodo 2004 a la Fecha) Monseñor: Héctor Cubillos Peña

DATOS BIOGRÁFICOS DE NUESTRO ACTUAL OBISPO
Monseñor Héctor Cubillos Peña nació en Santa fe de Bogotá el 17 de noviembre de 1949. Realizo sus estudios de primaria y bachillerato en el Seminario Menor de Bogotá. Cursó la Filosofía y la Teología en el Seminario Mayor de dicha Arquidiócesis (1968 – 1974).
Fue ordenado sacerdote en Bogotá el 29 de Noviembre de 1974 de manos del Cardenal Aníbal Muñoz Duque, incardinándose a la Arquidiócesis de Bogotá

Obtuvo la licenciatura en Teología Fundamental en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma (1978 – 1980).

Durante su ministerio sacerdotal ejerció estos encargos pastorales:

– Vicario parroquial en Cáqueza – Cundinamarca (1974 – 1976).
– Vicario parroquial del Buen Pastor de Bogotá (1976 – 1977).
– Superior del Seminario Menor de Bogotá (1977 – 1978).
– Formador y profesor del Seminario Mayor de Bogotá (1981 – 1994).
– Rector del Seminario Mayor de Bogotá (1994 – 1996).
– Rector del Santuario de Monserrate (1996).
– Director del Centro de Estudios Pastorales Cardenal Aníbal Muñoz Duque (1996 – 1997).
– Secretario del Canciller de la Curia Arquidiocesana de Bogotá (1997 – 2000).
– Rector de la Iglesia de San Juan de Dios de Bogotá (1997 – 2000).
– Párroco en San Juan Diego en Bogotá (2000 – 2002).
– Miembro del Consejo Presbiteral de Bogotá (2000 – 2002)
– El 23 de marzo de 2002, en la catedral de la Sagrada Familia, de Bucaramanga, Monseñor Héctor Cubillos Peña fue ordenado Obispo Auxiliar.
– Llega a nuestra Diócesis el 14 de agosto de 2004 como quinto obispo y con todo el animo de pastorear al pueblo encomendado y seguir apoyando los procesos evangelizadores iniciados por sus predecesores en comunión con sacerdotes, religiosas (os) y laicos.

RESEÑA DE LA ACTIVIDAD PASTORAL Y EVANGELIZADORA EN LA DIÓCESIS DE ZIPAQUIRÁ

Monseñor Héctor tomó posesión canónica como quinto obispo en Zipaquirá el 14 de agosto de 2004. Presidió el inicio de la Eucaristía el señor Nuncio Apostólico Beniamino Stella, concelebró el Administrador Apostólico, Monseñor Jorge Jiménez, el señor Cardenal Pedro Rubiano Sáenz y varios obispos más.

AÑO 2004
En su primer año visitó y conoció su presbiterio y algunas parroquias, ratificó en su mayoría a los integrantes del equipo de colaboradores de la Curia diocesana y de las delegaciones episcopales y fue estudiando y analizando el Plan diocesano de pastoral 2003-2013 ayudado por la comisión diocesana de pastoral que dejó organizada el anterior obispo, Monseñor Jorge Jiménez.

Bajo la guía del “Directorio para el Ministerio pastoral de los obispos”, Monseñor Héctor fue diseñando cada uno de los frentes de trabajo evangelizador para su diócesis y a su vez fue concretando la identidad y misión de cada uno de los organismos pastorales y administrativos. Así mismo retomó el trabajo misionero que llevaba la diócesis con el Itinerario “El camino del discípulo” que en el 2004 desarrolló en todas las parroquias el tema de ¿Quién eres tú, Jesús? con la metodología de la Lectio Divina promovida fuertemente por Monseñor Jiménez desde 1998.

Por aquel tiempo había una gran inquietud en el presbiterio de nuestra diócesis por tener un espacio de diálogo amplio acerca de las necesidades, situaciones difíciles, fortalezas y debilidades que viven los sacerdotes, por tal razón, Monseñor Cubillos dedicó su primer encuentro con el presbiterio, celebrado entre 8-9 de septiembre de 2004, al tema de la pastoral sacerdotal con el método Ver- Juzgar- Actuar (Ver la realidad sacerdotal, Juzgar o deber ser de la vida como presbíteros, Actuar para buscar el camino de renovación del presbiterio para dinamizar la pastoral sacerdotal).

AÑO 2005
En la reunión de enero 26 y 27 de 2005 con su presbiterio el nuevo obispo se dedicó a revisar y encausar, como presbiterio, los grandes proyectos pastorales que tiene nuestra diócesis en torno al plan pastoral para el año 2005, con el fin de fortalecer la comunión y participación en nuestra acción evangelizadora. En las dos reuniones de presbiterio (abril 6-7 y septiembre 7 y 8), Monseñor Héctor continuó dando prioridad al tema del sacerdote: El presbítero y la Eucaristía y la identidad y misión del sacerdote diocesano a partir del ministerio parroquial.

Durante este año, Monseñor Héctor continuó visitando las parroquias de la diócesis, en varias de las cuales nombró nuevos párrocos. También continuó impulsando el proceso misionero del “Camino del Discípulo” con el segundo itinerario que titulaba ¿Cómo seguirte, Jesús?

Del 20-23 de junio presidió la 14ª asamblea diocesana de pastoral y el primer congreso Eucarístico diocesano. El objetivo de la asamblea fue evaluar, corregir y brindar continuidad al camino pastoral diocesano 2004-2005 para seguir dando respuesta al objetivo del plan pastoral 2003-2013. Igualmente fue trabajando desde la Curia diocesana los estatutos del Consejo presbiteral, de las vicarías foráneas y de las delegaciones episcopales. Retomó el proyecto de su antecesor respecto a la formación de los laicos y creó el Instituto superior diocesano de formación pastoral “Sal Terræ” que comenzó a ofrecer un curso en tres niveles de formación básica cristiana para las vicarías urbanas.

A partir de este año se institucionalizó para mediados del mes de agosto la reunión de presbiterio para unirla a la celebración de la fiesta patronal diocesana, el aniversario de posesión canónica del señor obispo y como espacio para celebrar en presbiterio los aniversarios sacerdotales. También se dedicó un momento de la agenda para temas pastorales o administrativos, para el estudio de documentos pontificios o del Magisterio latinoamericano.

Desde estos primeros momentos de pastoreo de Monseñor Héctor en la diócesis manifestó un gran interés por apoyar el bienestar sacerdotal a través de la Fundación Bernardo Acosta Padilla. Desde allí promovió que todos los sacerdotes quedaran afiliados al régimen de salud, pensión, servicio exequial, caja de compensación y planes complementarios. Estos pagos beneficiaron de manera especial a aquellos sacerdotes que prestaban servicio fuera de la diócesis o que realizan estudios en el extranjero, para que durante su permanencia fuera de la diócesis no quedaran nunca excluidos de estas ayudas y pensiones. Igualmente se alcanzó la gran meta que todos los sacerdotes de esta diócesis obtuvieran de la Fundación la Congrua sustentación mensual.
AÑO 2006

Nuestro quinto obispo dio inicio a este año pastoral con la reunión de presbiterio del 26-27 de enero dando énfasis al proceso de iniciación cristiana. Durante las dos reuniones de presbiterio (abril 26 y septiembre 13-14) tomó como temas el proyecto personal de vida del presbítero y cómo hacer de las parroquias la casa y escuela de discípulos de Jesús. De igual forma se dio continuidad al proceso misionero del Camino del Discípulo con el tercer y último itinerario que llevaba por título ¿Cómo permanecer fieles a Jesús?

A partir de abril 18-19 de 2006 el señor obispo, en compañía del vicario general y el vicario de pastoral, fue elaborando un proyecto pastoral parroquial “discípulos misioneros” que buscaba impulsar el plan diocesano 2003-2013 y concretarlo en la vida de la parroquia y de los bautizados en sus diversos estados de vida. En esta reunión de “Villa Cecilia” se diseñó un esquema de 2 fases: preparación y ejecución con las correspondientes estructuras de organización (tres comisiones: teológica, catequética y pastoral). Las tres comisiones se integraron luego en un único equipo central conformado por el señor obispo, la srta. Oliva Gutiérrez, Mons. Olmos, P. Carlos Gómez, P. Alfonso Carrillo, P. Eduardo Suárez, P. Norberto Guzmán, P. Fabián Amaya y Padre José Luis Rodríguez. Este equipo desempeñó sus funciones entre 2006 y 2008.

Junto a este gran proyecto de aplicación del plan pastoral, Monseñor Cubillos se interesó en integrar y orientar los diversos mecanismos de planeación, ejecución y evaluación del Plan diocesano de pastoral, por ello se fueron revisando cada una de las estructuras pastorales existentes (comisión diocesana, asamblea diocesana, congresos diocesanos, delegaciones episcopales, vicarías foráneas, parroquias, prioridades vicariales, etc.) para evaluar su efectividad y su integración.

Del 19-22 de Junio de 2006, Monseñor Cubillos presidió la XV asamblea diocesana de pastoral cuyo lema fue: “La parroquia como «casa y escuela» de discípulos y misioneros de Jesucristo”. El objetivo general fue celebrar y renovar, en comunión con la Iglesia de Latinoamérica, nuestro llamado a ser discípulos y misioneros de Jesucristo para que, con la gracia del Espíritu, demos un nuevo impulso de vida a la parroquia que le ayude a fortalecerse más como “casa y escuela” de discípulos y misioneros del único Maestro. Uno de los temas tratados en esta Asamblea fue el de la iniciación cristiana.

A partir del segundo semestre, Monseñor Cubillos conformó una comisión pastoral con el fin de revisar la marcha del plan diocesano de pastoral 2003-2013 y diseñar un plan operativo que le diera un mayor dinamismo y una aplicabilidad más concreta en la vida parroquial a la luz del discipulado misionero. Durante este mismo período organizó un encuentro con cada vicaría foránea (del 7 de junio al 16 de noviembre) con el fin de conocer más los sacerdotes y la vida de las parroquias, tomar el pulso a la vida de presbiterio en la vicaría y retomar las prioridades vicariales de pastoral.

La marcha de la comisión diocesana, el consejo presbiteral y los demás consejos administrativos continuó, al igual que el Instituto Sal Terræ que culminó su labor en las dos vicarías urbanas de Santísima Trinidad y Jesucristo Sacerdote.

En diciembre 14 de este año, el pastor diocesano, junto con el presbiterio diocesano, bendijo el lote en el cual fue construyéndose una obra sacerdotal muy importante: el “Centro sacerdotal San Juan María Vianney”. Este lote formaba parte de un terreno legado por doña Sofía López Pumarejo a los padres claretianos, con el compromiso de construir en él una obra para el bienestar de los sacerdotes diocesanos. Esta obra, encargada a la Fundación Bernardo Acosta Padilla (conformada en el año 2003 por Monseñor Jiménez) fue inaugurada en su primera etapa el 18 de marzo de 2011 con la presencia de la reliquia del Corazón del Santo Cura de Ars.

El Centro sacerdotal constituye en la obra pastoral de Monseñor Héctor, uno de los más altos logros en bien del presbiterio de Zipaquirá. Es la cristalización de un gran sueño del presbiterio que se tenía desde hace muchos años. Este centro fue impulsado por Monseñor para ser la casa y la escuela de los sacerdotes de Zipaquirá. Casa de acogida y hermandad y escuela de formación permanente y de animación de la pastoral sacerdotal y de ejercicio ministerial.
AÑO 2007
Se inició el año con la reunión pastoral de enero 4 y 5 en la que se presentaron las dos primeras etapas del plan de renovación de la vida y la pastoral parroquial (preparación del plan operativo), y se establecieron las acciones pastorales a nivel parroquial, vicarial, diocesano y de delegaciones episcopales con el fin de impulsar el plan diocesano de pastoral.

Las dos primeras etapas de preparación del plan de renovación abordaban los aspectos del discipulado y la iniciación cristiana. Cada etapa se desarrollaba desde la parroquia y vicaría con un esquema de mesas de diálogo, también se hacía un trabajo paralelo desde el Seminario Mayor y todo esto se concluía con un congreso diocesano en el que se socializaban todos los aportes:

Etapa del discipulado: Congreso diocesano sobre el discipulado (junio 25 y 26 de 2007).
Etapa de iniciación cristiana: Congreso diocesano sobre iniciación cristiana (18 y 19 de febrero de 2008)
La tercera etapa fue sobre el tema de familia y concluyó con aportes de los congresos vicariales sobre familia que se llevaron a cabo en septiembre de 2008.
En mayo 13 a 31 de este 2007 se llevó a cabo en Aparecida la V Conferencia del Episcopado Latinoamericano con el lema “Discípulos misioneros de Jesucristo para que nuestros pueblos tengan vida”. Nuestra diócesis se vio muy identificada en su programa evangelizador con las conclusiones de esta Conferencia y a la vez ellas sirvieron de iluminación para el camino que Monseñor Héctor iba trazando con el plan operativo del discipulado misionero en parroquia.
Una muestra de esta gran sincronía existente entre el documento de Aparecida y nuestra marcha pastoral diocesana se puede percibir en los dos temas tratados en las reuniones de presbiterio: “El presbítero como discípulo de Jesucristo y formador de discípulos” (abril 18-19) y “La V Conferencia del Episcopado y sus implicaciones en la vida pastoral parroquial” (agosto 15-16).

Por este mismo año se dio inicio a una importante tarea pastoral que la Iglesia le confía a todo obispo diocesano: la realización de las visitas pastorales a toda su diócesis. Monseñor Héctor realizó esta primera ronda de visitas a las 73 parroquias durante los años 2007-2012. Como preparación a cada una de estas visitas se hizo una completa revisión de los aspectos administrativos, económicos, jurídicos, litúrgicos y de libros parroquiales en cada parroquia y un informe escrito para el señor obispo de la marcha pastoral con énfasis en la aplicación del plan pastoral diocesano. Cabe destacar que de los cinco obispos que ha tenido la diócesis, Monseñor Cubillos ha logrado, a través de las visitas pastorales y de los encuentros vicariales, un gran conocimiento de la realidad pastoral y social de cada una de sus parroquias. En cada visita el Pastor diocesano tuvo un encuentro muy cercano con el párroco (y sus vicarios parroquiales), las comunidades de vida consagrada, los diversos consejos y equipos pastorales, las autoridades civiles y militares, los líderes de la comunidad y el profesorado, los niños, los jóvenes y los fieles que habitan en el casco urbano y las veredas. El mayor interés de la visita del obispo fue el de presentar el Plan de renovación pastoral y llevar el mensaje fundamental del discipulado misionero para renovar la vida de las personas (sacerdotes, consagrados y laicos) y la estructura parroquial.

Estas visitas pastorales tuvieron el siguiente orden de vicarías: Santísima Trinidad (2007), Jesucristo Sacerdote (2008), Divino Salvador y Espíritu Santo (marzo de 2009 a junio de 2010), Ntra. Sra. del Rosario y Ntra. Señora de la Paz (Julio de 2010 a septiembre de 2011), Santo Cristo (2012).
El Instituto Sal Terræ inició un nuevo proceso formativo en las Vicarías de Divino Salvador y Santo Cristo.
AÑO 2008

Para comienzo de este año, Monseñor Cubillos volvió a llamar a la Compañía de padres de San Sulpicio para asumir la rectoría de nuestra Seminario Mayor, que durante los años 2000-2007 estuvo en manos de los padres diocesanos. El nuevo rector sulpiciano, padre Hernando Chitiva, quien reemplazó al padre Julio Alfredo Castañeda, estuvo al frente del Seminario los años 2008-2010 y a partir de 2011 le reemplazó el padre José María Castro. Los demás integrantes del equipo de formadores del Seminario fueron diocesanos y con ellos, Monseñor Héctor llevó a cabo una labor de acompañamiento y formación al grupo de seminaristas basado en la amplia experiencia que tuvo como formador en el Seminario Mayor de Bogotá. En este campo vocacional el señor obispo ha cosechado de 2004 a 2011 un fruto de veintinueve (29) presbíteros y un (1) diácono para la diócesis.

El año pastoral 2008 se inició con la reunión de enero 3 y 4 en la que se continuó con el presbiterio estudiando el tema de la renovación de la pastoral sacerdotal y de la vivencia de la economía de comunión. El 18 y 19 de febrero se realizó el congreso diocesano sobre iniciación cristiana que presentó la naturaleza, los principios teológicos y pastorales de la iniciación, el kerigma como parte de la iniciación, el desafío pastoral de la iniciación y el aporte de Aparecida a este tema. Este mismo documento del magisterio latinoamericano siguió siendo estudiado en diversos encuentros como el de la reunión de presbiterio de abril 2-3 cuyo tema fue “Sacerdotes llamados a ser padres y maestros en una parroquia casa y escuela de discípulos”.

Otro campo evangelizador impulsado por Monseñor Héctor no sólo para nuestra diócesis sino para todo el país y la Iglesia Latinoamericana fue el del Canal de televisión Cristo-Visión cuya sede está en Fontibón- Bogotá. Monseñor Héctor desde que se lanzó este proyecto estuvo presente y formando parte de la junta directiva. En abril de 2008 se comenzó a emitir la señal de este canal que ha venido prestando un enorme servicio y que a su vez ha requerido el apoyo económico de las diversas diócesis. Durante los siguientes años, Monseñor Cubillos ha continuado este empeño en el apoyo material y el la propagación del canal en la mayoría de municipios de nuestra diócesis.

Nuestro obispo también tuvo una estrecha vinculación a la Conferencia episcopal de Colombia a través del departamento de Doctrina y Ecumenismo del cual fue director en el trienio 2008-2010 y formó parte de la junta directiva del SENA en calidad de representante de la Conferencia episcopal desde 2008.

Monseñor Cubillos se interesó en que la diócesis tuviese su representación en la primera EXPO CATÓLICA que fue organizada por la Conferencia episcopal de Colombia con motivo de la celebración de su Centenario. Esta tuvo lugar del 27 al 31 de agosto de 2008 en el recinto de COMPENSAR en Bogotá y la diócesis fue representada por el Instituto Catequístico, el Instituto “Sal Terræ”, la pastoral de Misión Permanente, la pastoral de niños, pastoral educativa y pastoral de comunicaciones. Allí se presentó básicamente una información sobre la historia de la diócesis, su ubicación y el material propio que ha producido para la formación de laicos.

Durante este año se siguió desarrollando desde el Seminario Mayor, cada parroquia y vicaría foránea la segunda y tercera etapas preparatorias del Plan quinquenal (iniciación cristiana y familia) con el método VER-JUZGAR-ACTUAR a la luz del discipulado misionero. Todos estos aportes se recogieron y sintetizaron en la comisión conformada por el señor obispo para tal fin. El resultado fue un documento borrador del “Plan quinquenal diocesano de renovación pastoral parroquial” con el lema: “discípulos misioneros de Jesucristo y de la Iglesia en comunidades parroquiales al servicio de la familia”.

Este documento fue presentado en la XVI Asamblea diocesana de pastoral que tuvo dos etapas: noviembre 24-26 de 2008 y enero 29 y 30 de 2009. El objetivo de esta asamblea fue dar a conocer y asumir este Plan quinquenal como discípulos y formadores de discípulos misioneros de Jesucristo para hacer su aplicación a través de programas parroquiales y vicariales, de pastoral sacerdotal y de Seminario Mayor.
AÑO 2009
Este año inició con la segunda etapa de la XVI Asamblea diocesana en la que se lanzó oficialmente el Plan de renovación de la vida y de la pastoral parroquial para el quinquenio 2009-2013. Este plan operativo fue el fruto del proyecto iniciado en abril de 2006 y que contó con una amplia participación de toda la diócesis, personas, parroquias, movimientos e instituciones. El objetivo fue el de llevar a cabo el objetivo del plan pastoral 2003-2013 a través de un discipulado misionero en comunidades parroquiales al servicio de la familia. A este proceso de renovación se le conoció desde este momento con la sigla “PRP” para diferenciarlo del documento mismo del plan quinquenal al que se asignó el nombre de “PQ”.

Desde la publicación de la primera edición de este plan quinquenal, Monseñor Héctor conformó un nuevo equipo diocesano de dinamización del PRP. Este equipo lo integraron el vicario general, el coordinador diocesano del PRP, los delegados de cada uno de los tres programas del PRP (pastoral misionera, iniciación cristiana y pastoral familiar), dos párrocos y tres laicos catequistas. Con este equipo central se organizan tren etapas para el desarrollo del PRP en el bienio 2009-2010:

Etapa 1 (2009-2010) que busca una divulgación del texto mismo del PQ y de su mensaje sobre el discipulado para crear un ambiente de discipulado en toda la acción pastoral de la parroquia.
Etapa 2 (2009-2010) Formación a agentes de pastoral en las tres opciones del PQ: pastoral misionera, iniciación cristiana y pastoral familiar.
Etapa 3 (2010-2011) Desarrollo de la Misión parroquial familiar.

A su vez el equipo central comienza a publicar una serie de materiales pedagógicos para divulgar a todo nivel y para todas las edades el documento del PQ.

El PRP trajo a su vez una renovación de estructuras diocesanas que permitieran al obispo diocesano una mejor aplicación y seguimiento del Plan, por ello fue creado el equipo diocesano de dinamización del PRP del que ya se hizo mención y fue disuelta por Monseñor Héctor la comisión diocesana de pastoral para conformar el Consejo de vicarios foráneos que se reunió a partir de febrero de 2009 quincenalmente hasta el momento presente. También se organizó una visita vicarial evaluativa presidida por el obispo en el segundo semestre de cada año para hacer una revisión y evaluación de la marcha del PRP en sus tres etapas antes mencionadas. Por último se dio un mayor realce al consejo de pastoral parroquial (CPP) como organismo eclesial encargado de dinamizar en cada parroquia el PRP.

Las delegaciones episcopales de pastoral conformaron un equipo distinto coordinado por el vicario general, pero siempre bajo la guía del obispo y en clara orientación hacia el PRP y el servicio a la renovación de las parroquias.

A medida que fue trascurriendo el quinquenio se fue percibiendo que toda la vida espiritual, pastoral y formativa, tanto a nivel diocesano como vicarial y parroquial – incluyendo sacerdotes, seminaristas y agentes de pastoral – quedaba impregnada del PRP. La reunión de presbiterio de abril de 2009 se dedicó al anuncio del Kerigma al clero diocesano y en la reunión de agosto 13 y 14 se explicaron las 3 etapas del desarrollo del PRP antes mencionadas, en 2009 se publicó la normativa diocesana para sacramentos de iniciación cristiana; las visitas pastorales se centraron en la presentación del PQ, el mensaje del discipulado misionero y sus tres programas parroquiales; se estudió en los consejos diocesanos y en el presbiterio la propuesta de Misión Continental de la Conferencia episcopal y se hizo la debida aplicación a la diócesis en consonancia con el PRP; se intensificó el estudio y la reflexión sobre el tema de la “conversión pastoral” que nos exige Aparecida y el PQ; se escogieron las temáticas del discipulado misionero para los retiros espirituales del presbiterio a partir de 2009.

Con motivo del año sacerdotal promovido por el Papa Benedicto XVI entre junio de 2009 y junio de 2010, Monseñor Héctor impulsó mucho más la pastoral sacerdotal desde la óptica de la renovación del sacerdote en su ser de discípulo misionero y en su misión de formador de discípulos misioneros. Dos frutos concretos de este año sacerdotal fueron: a) la conformación en un buen número de parroquial del comité parroquial vocacional que contó con un estatuto propio promulgado por la diócesis, b) la Visita a la diócesis en marzo 18-20 de 2011 de las reliquias del corazón del santo Cura de Ars para pedir por la renovación de la vida y el ministerio de los sacerdotes.

AÑO 2010

En el segundo año de marcha del PRP, el señor obispo se reunió con su presbiterio del 3-5 de febrero con el fin de concretar criterios de unidad, programas, fechas, actividades y aspectos administrativos a nivel parroquial, vicarial y diocesano en torno al PRP. De manera especial se estudió la propuesta de Misión Continental de la Conferencia episcopal y se hizo la debida aplicación a la diócesis en consonancia con el PRP.

Este año 2010 fue especialmente dedicado a impulsar en toda la diócesis la Misión parroquial familiar (MPF) que buscó llevar el anuncio de la Buena Nueva al mayor número de familias en cada parroquia e ir conformando poco a poco pequeñas comunidades parroquiales que entren en un proceso de formación de su fe.
Con tal fin, Monseñor Cubillos, a través de la delegación episcopal de pastoral misionera, entregó a sacerdotes y agentes de pastoral el Manual del Misionero que fue el texto básico de orientación para desarrollar las cuatro (4) etapas de la MPF: a) formación espiritual y doctrinal de los misioneros, b) visitas familiares con el Anuncio del Kerigma, c) encuentros de profundización en el Kerigma, d) Conformación de pequeñas comunidades parroquiales.
Durante todo este año y parte de 2011 se brindó formación a todo nivel con base en este Manual y un buen número de parroquias comenzaron a desarrollar la primera etapa.

Simultáneamente el equipo central de animación del PRP fue elaborando algunos plegables sobre las seis características del discípulo y sobre la parroquia como casa y escuela de discípulos.
Así mismo una sub-comisión trabajó un proyecto de iniciación cristiana para adultos.

En la reunión de presbiterio del agosto 12 y 13 se tuvo la experiencia de 3 encuentros kerigmáticos con el presbiterio según lo plantea la MPF. El 14 de octubre se brindó nuevamente información al presbiterio acerca del Plan de renovación parroquial: los tres capítulos del Plan y su integración con los tres programas parroquiales; la integración de los tres programas; las cuatro etapas de la Misión parroquial familiar y la exigencia de “conversión pastoral” que plantea para diferenciarla de una Misión tradicional. También fueron presentados dos decretos episcopales a través de los cuales Monseñor Héctor quiso aplicar los criterios de renovación del PRP y dar una clara orientación diocesana. Estos dos decretos fueron: a) Orientaciones y normativa para la designación y renovación de los ministerios laicales, b) Normativa de los consejos parroquiales de pastoral (CPP).

Otro campo en el que Monseñor Héctor fue dando importantes orientaciones y criterios a los sacerdotes fue en el de la administración parroquial y el manejo de los bienes que están destinados básicamente al culto sagrado, al sustento digno del sacerdote y a las obras de caridad. Durante los años de pastoreo diocesano se ha enfatizado de diversa maneras acerca de la “conversión” en la mentalidad administrativa, la importancia de los consejos parroquiales de asuntos económicos y su formación, el debido proceso para solicitar ayudas al fondo pastoral diocesano, el aprendizaje del procedimiento para pedir ayuda a agencias internacionales, la entrega puntual y ordenada de reportes fiscales a los estamentos del gobierno, la debida organización de la contabilidad y el inventario parroquial, la importancia de la titulación de predios y la contratación laboral según la ley, la asesoría contable en cada vicaría con la ayuda de un profesional de ese campo, la correcta administración de emisoras y de cementerios según las normas dadas por el gobierno, la aplicación del Manual de administración de la diócesis y la debida atención a la colecta anual del diezmo para apoyar la obra del Centro Sacerdotal, el Seminario mayor y la pastoral caritativa de las parroquias.

En este campo administrativo han sido grandes los esfuerzos pero también muchos los obstáculos, especialmente de cambio de mentalidad por parte de los sacerdotes. Sin embargo la diócesis de Zipaquirá ha logrado en sus últimos diez años, avanzar notablemente en la organización, actualización y rendición oportuna de cuentas a los organismos de Estado
AÑO 2011

A partir de Julio de este año, Monseñor Héctor fue nombrado Presidente de la Comisión Episcopal de Lugares eclesiales para la vivencia de la comunión.

En el tercer año de aplicación del PRP en nuestra diócesis continuó la marcha de la Misión parroquial en varias parroquias y se hizo un refuerzo de formación de misioneros en varias vicarías con el fin de precisar los objetivos de la Misión y los frutos que se esperan cosechar.

Con el fin de imprimir un mayor dinamismo en la marcha del PRP en las parroquias, el señor obispo solicitó a cada vicario foráneo conformar un equipo dinamizador vicarial del PRP. Estos equipos recibieron una formación específica en tres encuentros realizados a lo largo del año y su desempeño sirvió notablemente para animar a las parroquias que están más lentas en la realización de los tres programas del PRP.

De parte del equipo dinamizador central del PRP se conformó una subcomisión encargada de elaborar el material de iniciación cristiana de adultos que servirá para la formación de las pequeñas comunidades parroquiales que son fruto de la MPF. El primer texto que incluye las tres primeras etapas del itinerario formativo fue promulgado por el señor obispo a finales de 2011. Las reuniones de presbiterio siguieron llevando su curso de aplicación del PRP. El 31 de enero y 1º de febrero se realizó la reunión de programación pastoral en la que se dedicó un espacio para acordar en vicaría algunos compromisos que permitan renovar la vida presbiteral.

Del 17 al 24 de marzo se organizó por parte del señor obispo y la Fundación BAP la visita de las reliquias del Santo Cura de Ars con motivo de la inauguración de la primera etapa de la Casa Sacerdotal San Juan María Vianney. Este también fue un tiempo privilegiado para orar por la renovación de la vida y el ministerio de los sacerdotes y por las vocaciones sacerdotales y religiosas. Durante este año se inició el proceso de erección de dos nuevas parroquias, una de ellas en el municipio de Tocancipá y otra en el municipio de Cajicá. Ambas parroquias surgen de la necesidad de una mayor atención pastoral a zonas urbanas e industriales.

Como un fruto del desarrollo del PRP fue entregado por el señor obispo a cada vicario el documento “Llamamiento vocacional de nuevos agentes de pastoral” con el fin de motivar esta tarea primordial en la pastoral parroquial, pues un signo de dinamismo y madurez de una parroquia es el incremento de sus agentes de pastoral. Uno de los medios eficaces que ha servido en una vicaría urbana son los cursos ALPHA promovidos por el mismo obispo como un método de primer anuncio a los alejados e indiferentes.

Otro fruto de la marcha del PRP fue la elaboración de un proyecto que busca la renovación de la vida y el ministerio de los presbíteros siguiendo el método Ver-Juzgar-Actuar. Con tal fin, Monseñor Cubillos conformó un equipo de reflexión y unos subcomités de laicos y sacerdotes con quienes elaboró algunas encuestas para responder a la primera etapa del Ver la realidad, las cuales se responderán en primer semestre de 2012.

Acerca de los ministros laicos de la diócesis se logró avanzar en la aplicación de la normativa diocesana promulgada en octubre de 2010. Tanto los candidatos a ministerio (Proclamadores de la Palabra o extraordinarios de la comunión) como los que renovaban su ministerio por dos años más recibieron la formación respectiva y el mismo obispo presidió la celebración de designación y renovación.

Como preparación al Sínodo universal de 2012 sobre la nueva Evangelización, la diócesis de Zipaquirá realizó una encuesta con los sacerdotes, misioneros y catequistas para responder los cuestionarios pedidos en el Documento de los Lineamenta. El 14 de octubre el señor obispo dio a conocer el nombramiento que hizo el Papa Benedicto XVI de tres nuevos Capellanes del Papa en nuestra diócesis. Ellos son: Monseñor Emilio Ballesteros, Monseñor Julio Alfredo Castañeda y Monseñor Carlos Arturo Gómez.

Respecto al Instituto Sal Terræ, concluyó la formación en la vicaría de Ntra. Sra. del Rosario e inició la formación en la Vicaría del Espíritu Santo en la que se conformaron dos sedes (Villapinzón y Machetá). Así mismo, en septiembre y octubre se realizó el primer curso integral de formación para familias organizado por el Instituto Sal Terræ y la delegación episcopal de familia con el fin de promover en las vicarías urbanas el tercer programa del PRP que busca conformar comités parroquiales de pastoral familiar.

A finales de este año, Monseñor Héctor conformó una comisión de preparación a la celebración de los 60 años de vida diocesana que tendrán su fecha culmen el 15 de agosto de 2012.

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